El administrador de propiedad horizontal es la persona encargada de gestionar los asuntos administrativos, financieros y legales de un conjunto residencial o comercial que se rige por la ley 675 de 2001. Esta ley establece las normas que regulan la convivencia, los derechos y las obligaciones de los copropietarios, los órganos de administración y el régimen sancionatorio en la propiedad horizontal.
Entre las funciones y roles del administrador de propiedad horizontal se encuentran:
– Representar legalmente a la copropiedad ante las autoridades, los proveedores, los empleados y los terceros.
– Ejecutar las decisiones de la asamblea general y el consejo de administración, así como informarles periódicamente sobre su gestión.
– Elaborar y presentar el presupuesto anual de ingresos y gastos, así como los estados financieros y contables de la copropiedad.
– Recaudar las cuotas ordinarias y extraordinarias de administración, así como cobrar las multas y los intereses por mora a los copropietarios morosos.
– Administrar los recursos financieros de la copropiedad, velando por su adecuada inversión, manejo y rendición de cuentas.
– Contratar y supervisar al personal necesario para el funcionamiento y mantenimiento de la copropiedad, así como cumplir con las obligaciones laborales, tributarias y de seguridad social.
– Velar por el cumplimiento del reglamento de propiedad horizontal, el manual de convivencia y las normas legales vigentes, así como imponer las sanciones correspondientes por su incumplimiento.
– Coordinar y supervisar las actividades de conservación, reparación y mejoramiento de las zonas comunes y los bienes de uso común de la copropiedad.
– Atender las solicitudes, quejas y reclamos de los copropietarios, residentes y visitantes, así como brindarles orientación e información sobre los asuntos relacionados con la copropiedad.
– Convocar y asistir a las reuniones de la asamblea general y el consejo de administración, así como elaborar y conservar las actas respectivas.
El rol del administrador de propiedad horizontal es fundamental para garantizar el buen funcionamiento, la armonía y el valor patrimonial de la copropiedad. Por ello, se requiere que sea una persona idónea, honesta, responsable y capacitada para desempeñar sus funciones con eficiencia y transparencia.